La Guardia... del Cardenal Richelieu

Paso a comentar a continuación algunas canciones de este grupo granadino. En 1987 cae en mis manos el archí conocido Lp, versión cassete “ Vámonos”, con su más archí conocido éxito, que ya tenía, en single de vinilo, “ Mil Calles Llevan hacia ti”. Ese cassete no abandonó, en casi ningún momento, mi walkman customizado ( lo forré con papel adhesivo de terciopelo azul) marca CROWN, de tamaño no mucho menor que un ladrillo de esos sin agujeritos.

Este grupo granadino me acompañó durante toda mi juventud, y aún hoy en día, 21 años después, lo escucho con asiduidad. Tras ese álbum sacaron, un par o tres de años después, su tercer trabajo, “ Cuando Brille el Sol”. Estilísticamente lo veo muy en la línea del “ Vámonos”, esto es, un rock melódico, soft, con letras pegadizas y canciones interpretadas con los instrumentos clásicos de siempre ( dos guitarras, bajo y batería, principalmente). Todos los temas de los dos discos, son muy escuchables y todavía hoy rezuman frescura.

Por esa época cae en mis manos, tras buscar y rebuscar en los grandes cajones de las tiendas de discos, esos que estaban llenos de cassetes en oferta, su primer trabajo, mucho más pop que los dos ya comentados, pero pop inglés, del que se hacía a finales de los 80. Canciones más oscuras, con ecos, teclados y un bajo con un papel mucho más principal ( con algunos temas muy en la línea de “ Depeche Mode”, para entendernos). Recomiendo “ Sólo Ella Puede Ser Así”, “ Haber Perdido Mi Tiempo” o “La Esfinge”. Para los que, aún hoy, sigan creyendo que “ Vámonos” fue su primer trabajo, les sugiero que busquen el anterior, tarea no muy difícil con la tecnología de hoy, y descubran ese otro sonido de los inicios de “ La Guardia”.

De “ Vámonos” me es imposible destacar un tema sobre otro. Es uno de esos discos que soy capaz de escuchar sin pasar ni una canción, al igual que me ocurre con el “ Sangre Española” de Manolo Tena, por ejemplo.

“ Cuando Brille el Sol”, sin embargo, aunque en la misma línea, marca un record en lo que llamo “ repeticiones excesivas”, esto es, machacar una frase o dos del estribillo, normalmente al final de la canción, hasta límites inimaginables... realmente no entiendo por qué una canción hay que alargarla tanto, con sucesivas repeticiones, hasta que llegue a los 4:27 minutos, si quedaría incluso mejor con 3:34 minutos... espero algún día alguien me explique el motivo, relativamente abundante en ciertos grupos. “ Otoño en la Ciudad”, “ La Carretera”, la canción que da título al disco y, entre otras, “ Donde Nace el Río” son buenos temas, sin que los demás desentonen. Eso sí, es un LP algo “ country”, con uso del banjo y melodías que nos recuerdan canciones de ese estilo norteamericano.